sábado, 26 de septiembre de 2009

Crónicas externadas

23 de septiembre de 2009

Hoy participe de la décima jornada del pre-festival y congreso latinoamericano de artistas internados y externados de hospitales psiquiátricos, que se realizo en el centro cultural San Martin.
Comencé viendo la muestra permanente de plástica y fotografía, del frente de artistas del Borda y del equipo regional de salud mental número siete. Los cuadros me parecieron hermosos, la gran mayoría con colores muy vivos y alegres. Había pinturas simples y otras, muy complejas. Me llamo la atención el dibujo de una mujer, de un reloj con los números invertidos. La parte fotográfica me pareció excelente, tomas en blanco y negro, tanto del hospital Borda como de otros sitios e incluso personas. Debajo de cada fotografía había una frase o un pequeño texto, generalmente, todos muy profundos y algunos muy fuertes.

A las 18:00 hr. hubo una jornada de apertura a cargo de Alberto Sava, proseguida por la mesa debate sobre “Arte y desmanicomialización” a cargo de Sava, Silvia Maltz (de la radio FM Desate, del Moyano) y Ángel Rutigliano del ESAM. La charla fue muy interesante, se resumieron las reformas de Italia, Río Negro y algunas más y cada panelista contaba la experiencia de sus talleres. Yo ya había concurrido en varias oportunidades a conferencias y charlas de Alberto Sava, incluso tengo el libro del frente de artistas por lo cual en términos generales ya había escuchado todo lo que se comento. Si me resultaron novedosos e interesante, los aportes de Silvia sobre la radio del Moyano, de la cual no tenia prácticamente información. También Rutigliano leyó un texto llamado “El manicomio no es soluble en Arte” donde hizo hincapié en pensar las prácticas artísticas como dispositivos subjetivantes que puedan insertarse en lo social, transformando tanto lo interpersonal como lo intrapersonal. Tomo el tema de la figura del público como testigo, como semejante, que es quien le da sentido al artista. De esta manera, el público rompe con esta analogía del loco como segregado social. Todo esto me pareció muy interesante, pero yo aun doblaría la apuesta y cuestionaría preguntando ¿El manicomio no es soluble en Arte? Proponiendo ampliar el tema, donde el arte sea realmente una herramienta más dentro del dispositivo de desmanicomialización, que claro esta va acompañado de otros factores como las políticas en salud mental, el factor social, juridico, etc. Luego retomo Sava, hablando sobre el arte como herramienta para cuestionar la estructura manicomial. Manifestando “…que la palabra Borda no sea mala palabra (…) hacerla añicos, desmitificarla.” una abstracción que se me represento en imágenes muy concretas. Amplio el debate sobre el proceso creador y los efectos que produce el arte a nivel social, transformando el imaginario colectivo, como así también en lo individual promulgando recuperar las capacidades perdidas por los sujetos, gracias a la desubjetivación que el manicomio produce. Me pareció muy interesante la idea de que sale la persona del manicomio y junto con ella, sale el arte denunciando afuera lo que no se puede denunciar adentro. El arte como revolución, como la palabra en acción puesta en el afuera representando de alguna manera la conflictiva intramuros. Sava comentaba acerca de la posición interna intocable que ellos poseen, producida por medio de lo que ellos denuncian afuera, con firmeza e implicancia, manteniendo asi una constancia que les produce más fuerza y esta sensación de “posición intocable”. De que “nadie les puede hacer nada” porque ellos enseguida hablan, no dan lugar al silencio. Todo esto minimiza el miedo ¿A que? El miedo a la represión, al borramiento de su propia subjetividad, a la violación de derechos humanos, a la falta de libertad de expresión, etc, etc. Finalizo entonces la mesa debate, Silvia Maltz comentando el tema de la jefatura del hospital Moyano, de la época de la dictadura y que el silencio del Moyano se debe a que el miedo calo hondo y produjo este silencio y esta quietud que allí se respira.
A las 19:15 hr. comenzó una charla sobre FM desate a cargo de Maltz donde se proyecto un video sobre un micro debate acerca del cierre del hospital Moyano. Realmente fue muy interesante escuchar las opiniones de todas las internas, que muy bien informadas, tomaron posición frente a Macri hablando acerca de sus derechos y oponiéndose rotundamente al cierre del hospital. Por ejemplo una interna decía:“…me parece que Macri no esta bien de la cabeza para hacer una cosa asi, no puede dejar a la gente afuera y llevar a las pacientes a donde se le ocurre a él, quiere hacer un negocio con el hospital…” a lo que una compañera responde: “…yo opino lo mismo, jugar con la salud de esta manera me parece una cosa monstruosa…”. Creo que no hay nada más que agregar.
En el video se hacen escuchar muchisimas voces que tocan diversos temas; desde como las pacientes son tratadas como objetos hasta como los directivos mismos prohibían que las demás pacientes vieran este video para que no se “movilicen”. Luego del video la charla se mantuvo sobre el eje del Macrismo, de la lógica del encierro manicomial, de la ridícula idea de hacer “minibordas y minimoyanos” mientras que el sistema tutelar jurídico vigente sigue siendo un sistema de encierro que refuerza lo manicomial. Finalmente, escuchamos un audio donde las internas comentaban acerca de lo que la radio produce (como romper rutinas, cadenas, etc) y también comentando porque es FM DESATE: porque desate pega con debate, decían, y desatarse en algún punto es liberarse de su enfermedad y poder expresarse. También comentaron su relación con los oyentes y la creatividad, la expresión y la comunicación como esencia de los individuos.
Me llamo la atención que varias veces se comparo al manicomio con los campos de concentración o se nombro en varias oportunidades, la época de la dictadura. Incluso una interna del Moyano decía en el micro debate de la radio: “…si ni los militares pudieron cerrar el hospital, no lo va a cerrar Macri…”. Otra interna haciendo referencia a la radio como espacio de comunicación, decía que el silencio no es salud, lo cual es una reseña también a la época del proceso, en cuanto a la famosa frase de que el silencio era salud.

Por ultimo en la sala Enrique Muiño, se presento un numero de circo del frente de artistas del Borda llamado “El tiempo de la maquina”, el cual me pareció realmente muy bueno. Luego, se presento el taller de expresión corporal, también del frente de artistas, con una obra llamada “El despertar”. Realmente, esta puesta en escena me resulto excelente, profunda y para reflexionar realmente, y ponerse en el lugar del otro para poder tomar conciencia de un sin fin de cuestiones. La obra es prácticamente muda, varias internos vestidos de negro (ósea, talleristas que hacen de internos) caminan por el escenario con un caja llena de pastillas, haciendo ruido. Van apareciendo en escena tres médicos vestidos de blanco que gritan “Medicación” y ellos van tomando, hasta que en un momento se van quedando inmóviles, como desganados y tristes y es ahí cuando gritan “BASTA” y los médicos desaparecen. A partir de allí, con música clásica de fondo, cada uno se va despertando, va tomando conciencia de su propio cuerpo, de sus dimensiones, todo esto en base a la expresión corporal. Luego comienzan a mirarse, a reconocerse, a tocarse, abrazarse entre todos y asi termina la obra con una música increíble que produce piel de gallina, con un silencio ensordecedor y una tierna escena donde hombres y mujeres se abrazan y contienen entre si. Sinceramente, me emociono mucho y me pareció una manera muy sutil y a la vez muy cruda de mostrar una realidad que permanece velada. De contar cuales son los efectos colaterales o nocivos, si se quiere, que la medicación o el exceso de psicofármacos produce en estos sujetos que poseen los mismos derechos que cualquier mortal, aunque muchos opinen lo contrario.

Quisiera terminar con un pequeño texto que estaba debajo de una fotografía y que resume de alguna manera la sensación que muchos internos deben padecer dentro de los manicomios, entre rejas y sombras:
“Si la reja se esfuma…si las nubes bajan…si el sol sale más de una vez al día…y ya no tengo que comer más polenta…si las paredes se deforman y el afuera es el adentro…si la luz dibuja formas y junta graffitis en una lata…¿Sera que estoy soñando?”.
Yo creo que la vida es un sueño y que hay que despertarse, para hacerlo realidad.

N.P.S









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